Este 24 de Noviembre me sumo con orgullo a todos aquellos que somos concientes de nuestro origen evolutivo. Espero que se convierta en una fecha que nos permita llegar a más gente y que nos sirva para encontrarnos, disfrutar y celebrar ese tan hermoso y largo proceso evolutivo que nos ha permitido estar aquí, aunque no lo estemos haciendo del todo bien.
Zoológico Isla palma.
Uno se conmueve cuando se encuentra cara a cara con monitos del nuevo mundo, observar sus características físicas que dejan ver el extraordinario parecido con nosotros, sus ojos vivaces nos expresan alegría, curiosidad o tristeza, el poder acariciar y sentir el roce de la piel de sus manos permite percibir el encuentro con un pasado común lo que inevitablemente imprime en mi ser, un fuerte sello emocional. Sus rostros nos impactan y parecen manifestar interés hacia nosotros. Queridos primos no me gusta verlos tras las rejas, no sé como llegaron allí, ni por que, solo puedo irme con la alegría de estrechar sus manos y con la infinita tristeza que produce la crueldad humana.
Nuestro genoma y el del chimpancé varía aproximadamente en menos del 1% es decir nuestra cercanía es muy estrecha. Realmente estamos aun palmo de distancia.
Zoológico Isla palma.
La ciencia con una de sus ramas, la genética molecular esta trabajando fuertemente en todo el mundo y sorprendiéndonos con sus hallazgos. Traigo unos pocos ejemplos que ratifican una vez más que no existe, ningún proceso divino creador intencional y mucho menos inmutable en el origen de las especies y que aunque le duela al imperante orgullo de unos cuantos sapiens religiosus soberbius ignorantis las especies somos como bien lo dijo Kart Von Linnaeus producto del tiempo.
En su libro de genética molecular humana el doctor Tobías Mojica profesor de mi querida Universidad Nacional nos dice que hace aproximadamente 27 a 33 millones de años los monos del viejo mundo se separaron de la línea evolutiva de los primates, los gibones se separaron hace 18-22 millones de años, el orangután de 13-16 millones de años, el gorila entre 8-12 millones de años y que humanos y chimpancés compartimos un antepasado común hace apenas 6.3 a 7.7 millones de años.
El doctor David Haussler director del centro de ciencia e ingeniería biomolecular de la U. de California encontró fuertes indicios de que el gen HAR1F está implicado en el aumento de la corteza cerebral humana que es tres veces mas grande que en el chimpancé. Este gen tiene tan solo 18 diferencias entre chimpancés y humanos. En el feto humano ese gen se enciende en la semana 7 después de la concepción y se apaga en la semana 19. Recordemos que en la corteza se llevan a cabo funciones complejas como el lenguaje y el procesamiento de la información.
En la universidad de San Diego California Ajird Varky esta investigando la desaparición de un gen en los humanos que se encuentra en la mayoría de los animales incluso en chimpancés y que controla la producción de acido siálico, esta desaparición puede estar vinculada al desarrollo cerebral y al surgimiento del pensamiento abstracto.
Darwin y Wallace dispararon un cañonazo que se supone debió acabar con la concepción que se tiene de un origen sobrenatural de la vida y de los seres humanos en nuestro planeta, pero como vemos las supersticiones continúan manejando la vida de muchos seres humanos hoy en día. Que lástima el mundo vivió muchos siglos bajo la creencia de que la tierra era el centro del universo esto sostenido por la poderosa clase dominante de la época auxiliada por la espada y derramando sangre inocente por doquier hoy las mismas mentes retrógradas intentan ocultar el innegable hecho evolutivo.
¿ Hasta cuándo con este embolate cómico, trágico, absurdo supersticioso ?
Jumartínpescador ORGULLOSAMENTE PRIMATE.
